El significado de las Profecías Mayas para el Año 2012

Los problemas que saturan el planeta tienen una raíz común: la falla espiritual de la humanidad – la inhabilidad del humano de obtener maestría espiritual. Inmadurez moral y emocional son el resultado. Ahora debemos prestar atención al mensaje de todos los grandes maestros espirituales. Todos eran “solo humanos,” y sin embargo obtuvieron maestría espiritual. Puede que menciones el año 2012 en muchas partes del mundo y la gente a menudo responderá preguntando, “¿No es ese el fin del calendario Maya?” Hace veinte años casi nadie sabía sobre esta fecha. Hoy, si buscas en Internet encontrarás numerosas páginas del 2012. Si hubo alguna vez una fecha que parecía corresponder con “la Hora,” o el “Día Final,” es el 2012.

El aire abunda con especulaciones sobre lo que ocurrirá en esta fecha, más específicamente en el solsticio de invierno (hemisferio norte), 21 de diciembre, 2012. A menudo la gente habla de un cataclismo, un desastre natural o una guerra mundial. Otros advierten sobre eventos sobrenaturales – visitaciones extraterrestres o algún fenómeno cósmico impredecible no visto hasta ahora que irrevocablemente alterará la naturaleza de nuestra percepción de la realidad. Todavía otros ven en esta fecha el cumplimiento de profecías antiguas bíblicas, ó de lo que se habla también en el Corán – la segunda creación, un nuevo cielo y una nueva tierra. O más científicamente, algunos especulan que esta fecha puede marcar el inicio de un nuevo ciclo evolucionario o era geológica en la historia de la tierra. Es importante dar mucha luz a esta fecha para que podamos determinar por nosotros mismos lo que puede significar y porque la maestría espiritual tiene un valor único en este tiempo.

La fecha 2012 viene del calendario cuenta larga Maya, el cuál define un ciclo muy preciso de 1.872.000 días empezando el 13 de agosto de 3113 AC (14 de agosto de 3114 AC en la cuenta Juliana), y finalizando en el decisivo día, 21 de diciembre del 2012. Este intervalo de días es a menudo referido como “el Gran Ciclo.” Esto no es sólo una cuenta de días fortuita, ya que integra el ciclo completo de la historia como la conocemos – esto es, desde el inicio de la primera dinastía en Egipto y la primera ciudad de Uruk en Iraq, ambas fechadas 3100 AC aproximadamente, al estado acelerado de la globalización, cambios de clima y guerra en el que nos encontramos. Sí, el final de la historia – ese es el significado del 2012. Y ¿quién puede dudar que el estado de los asuntos en el mundo hoy están en algún punto climático de desmoronarse?  El calendario Maya dice que la revolución científica, que comenzó en el año 1618, terminará, junto con toda la historia, 144.000 días más tarde, en el año 2012. A pesar de que hablamos de un cambio cósmico de la conciencia y del estado evolutivo, ésta no es una materia para que pasivamente esperemos que suceda. La calidad de lo que esta a punto de ocurrir depende de nuestra respuesta a la profecía del 2012. Es por esto que también hablamos de maestría espiritual. Seguramente entre ahora y el 2012, todos los seres con mentes espirituales, sin duda representando cada fe viva en esta Tierra y otros, pueden crear un tipo de batería espiritual para cargar el ambiente mental humano con una vibración poderosa inimaginable que el efecto será notado por todas esas entidades guardianas siempre observando lo que hacemos hasta nuestra ahora errante humanidad. Y de su compasión por nuestro planeta, estos órdenes angélicos con su esfuerzo de maestría espiritual, puede que al fin respondan. ¡Qué gran evento sería éste! Pero para obtener tal efecto, debe haber una unidad sin precedente de propósitos cortando barreras de lenguaje, cultura y creencia. Esto es precisamente a lo que se llama para la profecía del 2012 – una convergencia armónica de los adeptos espirituales de todas las creencias y tradiciones.   No debemos decir qué actos creativos saldrán de los efectos acumulados de tal esfuerzo, actos impredecibles desde nuestro ventajoso punto presente. Pero si uno toma una hora cada día para esta práctica, anónimamente y sin buscar ningún beneficio personal en pro del mejoramiento del entero y la salvación de la Tierra, no hay duda que la llegada de la Hora en el 2012 será solo una de la iluminación total y el renacer de maravilla imaginaria. Comencemos ahora, y procedamos, día a día, hasta la llegada del momento exaltado – que el mundo comenzará de nuevo.